Historias: Una pulsera de plata sorprendente

Claudio quería regalarle a su mujer una pulsera de plata. Era su Aniversario, y para ellos representaba una ocasión muy especial. Quería que la pulsera tuviera algo de él: su inspiración, su visión… Había dibujado en un papel una imagen, una forma muy sugerente, pero que, tal y como me contó después, no tenía muy claro cómo podría fabricarse.

Hablamos de las posibilidades, le expliqué algunas técnicas y materiales que podrían aplicarse para hacer realidad su visión, y finalmente elegimos una opción que fuera viable estéticamente, y que encajara con su presupuesto.

Fue todo un reto, el dibujo mostraba un complejo entramado de líneas. Había que darle sentido, proporcionalidad, ritmo, equilibrio… El resultado fue una pulsera de unos 4 cm de ancho, resistente a la deformación, pero con una abertura flexible para ponerla en el antebrazo.

En la elaboración trabajé con un bastidor de hilo de plata, de cierto grosor. El hilo debía entrelazarse, creando caprichosas formas, que permitían en algunos lugares de la trama, poner piedras preciosas, que inicialmente fueron cabuchón de colores, pero que finalmente cambié por nácares, que le daban una luz muy especial.

Este proyecto es un ejemplo del trabajo que “mano a mano” realizó con mis clientes. Joyas personalizadas, para momentos muy especiales, que tendrán mucho de su inspiración y visión. Creaciones donde las ideas fluyen en ambas direcciones, y donde se hace necesaria la comunicación y la confianza.